23 de julio de 2008

Tropa de élite (2007), Jose Padilha




Una de las características más interesantes que puede proponer el cine documental –bajo mi punto de vista, la mejor- es un carácter analítico de denuncia hacia aquello hacia lo que enfoca y sobre lo que reflexiona. En los últimos tiempos han ido llegando a nuestras pantallas una serie de títulos procedentes del cine latinoamericano contagiados de un halo comprometido, realizados con una filmación fresca y directa. Lo cual no quiere decir que todo el cine latinoamericano -tanto el que nos llega como el que no- haya sido tocado por la misma barita, sino que éste contiene un rasgo general que del mismo modo lo honra: la diversidad de sus propuestas. Bien es cierto que hay mucha vida más allá del cine combativo tan alagado por la crítica.
En países como colombia, la temática del narcotráfico, abordada en Tropa de élite, es la primera propuesta de producción. Así vimos del mismo modo coproducciones como María llena eres de gracia (J. Martson, 2004) o La virgen de los sicarios Barbet Schroeder, 2000). Así podríamos citar un sinfín de películas latinoamericanas que tranten temas espinosos y busquen el compromiso y la denuncia, partiendo por ejemplo –buscando a un compatriota de Padilha- de Rocha.
Si de Brasil nos impactó hace ya unos años la Estación central de Brasil de Walter Salles, la Ciudad de Dios de Meirelles, se asemeja mucho más al estilo de filmar y la temática del film de Jose Padilha. Y es que, como venimos diciendo, Padilla utiliza esa misma cámara temblorosa y escurridiza que Meirelles en su Ciudad de Dios, y no duda en filmar un tipo de imagen casi documental que muestra –con todas las letras- la cruda realidad. Tropa de élite es un film duro, un pedazo de realidad representada en la ficción. Siguiendo el trabajo del documentalista –no se olviden del documental Bus 174 de éste mismo director-, Padilha se relacionó durante dos años con el Batallón de Operaciones Policiales Especiales (BOPE) de Brasil, entrevistándose con ellos, con sus psiquiatras y con miembros de la Policía. Todo para conseguir que su trabajo represente la verdadera realidad del modo de actuación de dicho batallón y de la situación de la corrupción policial y el narcotráfico en las favelas. Algo que queda reflejado a la perfección mediante una narración sólida que mantiene al espectador en vilo durante todo un metraje donde el trabajo actoral es espectacular.
Tropa de élite fue el film sensación del último Festival de Berlín -donde se llevó el Oso de Oro- y un auténtico taquillazo en Brasil. No obstante, el robo de una copia en DVD de las oficinas de la productora tres meses antes del estreno en Brasil, permitió que once millones y medio de habitantes lo visionaran en versión pirata. Muchos repitieron en pantalla grande.

11 comentarios:

Ariel Luque dijo...

Bueno a esta peli no la pude ver, todavía. Ya la voy a ver. En cuanto a eso que dijiste de la copia robada, creo que esta estandarizado que alguien se robe una copia de una pelicula antes de su estreno. Ya pasó a ser una ley comercial jaja. Bueno un abrazo y muy buen post.

yorgos dijo...

muy buen apunte, jaja!!
pues si te gustó el estilo de ciudad de dios, te gustará. eso sí, yo diría que es incluso bastante más dura que ésta. hay escenitas...
abrazos!

Liliana dijo...

Yo creo que Ciudad de Dios no le debe nada al documental, no sé esta otra película. Han dicho que hay escenas muy duras... y si es una ficción, te voy a ser sincera, no sé si me anime a verla. Es que ya con la violencia se ha llegado a un punto tal que desconfías de todo lo que ves. Es decir, con la intención de hacer llegar más violencia al espectador ávido de ésta, se cargan las tintas de una manera feroz... No es poca cosa si vives en este continente.
Ciudad de Dios, más allá del tema, es cinematográficamente notable. La virgen de los sicarios, más allá del tema, me fascina por la relación del intelectual con su país de origen cuando regresa.
¿Qué tiene esta película, más allá de la violencia? (Ojalá que mucho, así me animo a verla).

Diego Faraone dijo...

Las de Padilha y Ciudad de Dios son las mejores por lejos de las que nombrás. Yo además te recomendaría mucho Madame Satá y Anjos do sou, que se inscriben en esta tendencia realista e impactante.

yorgos dijo...

Ciertamente, ciudad de dios en cuanto a ficción, poco puede tener de documental. en realidad utilizar el término tal vez haya sido excesivo. yo me refería básicamente a su carácter realista, aportado principalmente por ese modo de filmar, por la cámara al hombro, los cambios de plano, etc. a ésta tipología se la solía catalogar de cierta sintonía con la documental, por eso utilicé el término. en cuanto a "Tropa de élite", la filmación con estas características creo que es algo más patente, y la acercan más al documental unos fragmentos descriptivo-informativos de los ritos del batallón especial, ya que en esas imágenes bien podían ser personajes reales en vez de actores y no nos daríamos cuenta. además, la forma de lanzar su mensaje comprometido y de denuncia, creo que está relacionado. eso sí, es una ficción, evidentemente.
Sin embargo la violencia no es gratuita. y digo ésto porque el fin de la película es intentar mostrar al mundo toda la violencia que no se ve sino dentro de esas favelas para condenarla y que el espectador se conciencie de lo que ocurre. no obstante es verdad -aunque crea que no es el caso- lo que dices Liliana de que se abusa de la violencia: es muy posible que esta pelicula entrara en cartel en unos grandes cines comercialisimos donde la vi, porque la vendieron con un pack de otras peliculas más taquilleras. sin embargo, por su carácter violento y de acción, estoy seguro de que en vez de desaparecer en una semana como les ocurre a las pocas películas que merecen la pena ver en estos cines -si es que llegan-, tendrá más éxito de taquilla y se mantendrá algo más.
Pero bueno, ya me estoy despistando, respondiendo a lo que preguntaste: más allá de esa violencia hay una reflexión. una denuncia, un dilema moral, principalmente el de una gente que no sabe de qué forma ayudar a la sociedad y que se convierten en verdaderos animales que luego también tienen familia. hay un acercamiento reflexivo hacia la vida de éstas personas. está el eterno debate entre el abuso de poder de la policía y el de las mafias, etc. yo creo que se ponen las cartas sobre la mesa para que las podamos leer bien.
Eso sí, en los primeros minutos del film, da la sensción de buscar algo de morbo y de intentar acercarse al espectador de un modo convencional, como intentando captar al espectador medio. lo cual me provocó cierto desconcierto tras el visionado del film. no obstante, creo que el resto va por otro cauce.
Gracias por las recomendaciones faraway, se tendrán en cuenta. a mí personalmente también me gustaron mucho las de Meirelles y padilha, pero la virgen de los sicarios también me pareció recomendable. y hablando de Meirelles, por ahí aún no circula su adaptaión del relato de Saramago, ¿no?. tengo curiosidad por verla.

un abrazo a todos

Anónimo dijo...

En mi opinión, y al margen de las intenciones de Padilha a la hora de hacer este film, la película es una apología de la violencia policial (al margen de la ley) en toda regla.

Saludos.

yorgos dijo...

Un gusto tenerte por aquí Babel. He visitado tu blog y he visto tu artículo sobre la película. La verdad es que he visto varios artículos con la misma opinón, eso sí, no todos. Por ejemplo, la cahiers españa de este mes opina más o menos lo mismo que tú.
No sé, a mí no me pareció eso, tal vez la analicé condicionado al creer que su autor no queria expresar eso. De hecho, como tú bien dices que parece ser, creo que no es lo que busca. El hecho de que la voz en off del protagonista del BOPE conduzca el film en primera persona, puede ser un condicionante para que una parte el público identifique ésta voz con la del autor del film. Sin embargo yo creo que lo que quiere hacer Padilha es mostrar el conflicto de forma diferente, bajo el punto de vista de este batallón sin escrúpulos capaz de las mayores barbaridades. Como en ciudad de dios, la historia gira entorno a varios protagonistas, en ésta, había una mayor pluralidad, y en Tropa de élite los tres hilos conductores forman part de una misma ideología o posicionamiento, lo cual también condiciona al espectador.

No se vayan a pensar que yo defiendo nada del abuso de violencia y de poder y mucho menos ideales de derechas eh!! todo lo contrario por dios!!!!
Entiendo tu punto de vista como te digo, Babel, pero yo no creo que el film en sí sea una apología, lo veo más como un testimonio narrado por una parte de las piezas que participan.
un saludo

yorgos dijo...

Un gusto tenerte por aquí Babel. He visitado tu blog y he visto tu artículo sobre la película. La verdad es que he visto varios artículos con la misma opinón, eso sí, no todos. Por ejemplo, la cahiers españa de este mes opina más o menos lo mismo que tú.
No sé, a mí no me pareció eso, tal vez la analicé condicionado al creer que su autor no queria expresar eso. De hecho, como tú bien dices que parece ser, creo que no es lo que busca. El hecho de que la voz en off del protagonista del BOPE conduzca el film en primera persona, puede ser un condicionante para que una parte el público identifique ésta voz con la del autor del film. Sin embargo yo creo que lo que quiere hacer Padilha es mostrar el conflicto de forma diferente, bajo el punto de vista de este batallón sin escrúpulos capaz de las mayores barbaridades. Como en ciudad de dios, la historia gira entorno a varios protagonistas, en ésta, había una mayor pluralidad, y en Tropa de élite los tres hilos conductores forman part de una misma ideología o posicionamiento, lo cual también condiciona al espectador.

No se vayan a pensar que yo defiendo nada del abuso de violencia y de poder y mucho menos ideales de derechas eh!! todo lo contrario por dios!!!!
Entiendo tu punto de vista como te digo, Babel, pero yo no creo que el film en sí sea una apología, lo veo más como un testimonio narrado por una parte de las piezas que participan.
un saludo

Liliana dijo...

Tendré que verla, Yorgos para poder opinar con propiedad. Realmente, aunque no soy prejuiciosa con el cine, con esta película sí me pasó que no supe si tendría estómago para verla. Es que la violencia a veces es lo único que sacas de las películas y me dio temor de estar ante una película que muestre lo "oscuro" de estas regiones, como decía Glauber Rocha, de una manera "pintoresca".
En fin... buscaré armarme de valor para verla y poder comentar con conocimiento de causa.
Un abrazo

Los ojos sin rostro dijo...

Hola!
Pues me han entrado ganas de ver esta película, leyendo lo que cuentas. También me apetece en parte por la polémica que parece generar a su alrededor. Probablemente no sea un título muy apropiado para el veranito, pero bueno.

Lo del aspecto de mi blog ahora cuando tenga un rato lo miraré con más detenimiento, que de blogspot todavía no controlo nada de nada. Estuve mirando plantillas y tal pero hacen cosas raras...

Un saludote!

David Cotos dijo...

Bien crudo el filme, harto interesante de principio a fin.